Silla hormiga de Arne Jacobsen

La icónica silla hormiga fue diseñada por el arquitecto y diseñador Arne Jacobsen. Su destino original fue para el ayuntamiento de Rodrove en 1.951, y para las cafeterías de la empresa danesa Novo Nordisk. Su nombre proviene de la forma de la silla, que es similar a una hormiga con la cabeza levantada. El diseño buscaba la ligereza, la estabilidad, la facilidad de transporte y además la posibilidad de mover los pies sin chocar con las patas. Inicialmente se encargaron 300 ejemplares, fabricados por la compañía danesa Fritz Hansen a partir de madera laminada pintada y patas de plástico. Cuando la silla comenzó a popularizarse y empezó su producción en serie, el plástico de las patas se reemplazó por tubos de acero, y además apareció una versión con cuatro patas. La pieza de madera laminada está moldeada de tal manera que asiento y respaldo se convierten en una sola pieza, lo que le da al respaldo una cierta flexibilidad que la hace más cómoda, además de hacer más sencillo su fabricación. Las patas de acero, se unen mediante tacos de goma, facilitando así el montaje.

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